La Semana Europea de la Movilidad ya ha empezado, así que siéntate, ponte cómodo y déjanos explicarte cómo puedes, poco a poco, hacer de tu ciudad un ejemplo de la movilidad baja emisiones desde tu ayuntamiento.
Es muy probable que tengas muchas ideas y que no sepas por dónde empezar para mejorar tanto las infraestructuras de transporte, como el impacto ambiental de estos y la satisfacción de los ciudadanos. Todo no se puede hacer a la vez pero cada paso es importante.
Si hay alguien que tiene en mente las prioridades para una mejor movilidad diaria es el ciudadano. Ya sea de camino al colegio, al trabajo o a cualquier otro lugar, se enfrenta cada día a la necesidad de desplazarse por el centro urbano y las afueras. Así que ¡pregúntale!
Mejorar las infraestructuras de transporte público supone inversiones importantes, por lo que tienes que asegurarte de que los cambios que pones en marcha tendrán un impacto positivo real y medible para los habitantes.
Puede que algunos cambios sugeridos por la ciudadanía no sean responsabilidades de tu ayuntamiento por lo que tendrás que sentarte con los actores implicados y defender tus propuestas y observaciones.
Aquí te dejamos algunas ideas para mejorar la movilidad de los ciudadanos y reducir las emisiones del sector del transporte:
La creación de una comunidad energética permite una mejor cooperación entre todos los actores implicados en la movilidad y suele facilitar la comunicación entre ellos así como el acceso a subvenciones y otras fuentes de financiación.
Llamamos billete climático a un bono de transporte temporal que permite utilizar todos o la gran mayoría de los transportes públicos de una zona a un precio muy asequible con el objetivo de reducir el uso del coche privado y de incentivar a la ciudadanía a desplazarse de manera más respetuosa con el medioambiente.
Varios países europeos ya lo han puesto en marcha y han constatado una reducción del uso del coche individual y una mayor afluencia en los transportes públicos.
Alemania empezó el año pasado proponiendo billetes de tren por 9€/mes hasta lanzar este verano el Deutschland Ticket por 49€/mes que permite utilizar de manera ilimitada la casi totalidad de los transportes públicos del país.
El caso de Luxemburgo es peculiar ya que desde 2021 se puede recorrer todo el país de manera totalmente gratuita usando los transportes públicos.
El gobierno no tiene una política anti-coches como lo explica el viceprimer ministro François Bausch “No deberías argumentar en contra de algo, sino a favor.”, en este caso, a favor del transporte público.
En Austria el billete climático cuesta 1095€/año o lo que equivale a 3€/día, lo que puede parecer caro si no tenemos en cuenta el hecho de que el salario mensual medio en Austria es de 2.375,52€, muy por encima de los 1.790,86€ de España.
En cualquier caso, un billete climático debe ser más rentable que el uso del coche.
Entonces, ¿con qué va a empezar?